Hola, bienvenidos.

No se hagan falsas ilusiones y no piensen que el ataque bloggero llegó para quedarse.

Sólo me pareció copado compartir mi mundo; pasado, presente y futuro.

Igual, dense una vueltita de vez en cuando, tal como se visitan viejos amigos...

domingo, 18 de abril de 2010

No hagas a los demás lo que no te gusta que te hagan a vos

1°: si los demás opinan de vos y no te gusta lo que opinan, dejalos. Ya encontrarán otro sujeto para decir sandeces. Me enseñó mi mamá que el mejor remedio contra la envidia es ignorar completamente los comentarios viles.
2°: si te sentís tentado a opinar sobre los demás, pensá cómo te sentís cuando opinan de vos. El “ojo por ojo” funciona hasta quedarnos completamente ciegos. Y no es una buena forma de ir por la vida. Mi viejo me dijo alguna vez que herir a alguien porque nosotros estamos heridos es algo que hacen los animales. Distingámonos aunque tengamos genes similares con algunos.
3°: si sentís que algo te retrasa, examiná tu interior y después a los demás. Es más fácil encontrar la raíz del problema en nosotros mismos y solucionarlo, que esperar que otra persona cambie algo de si mismo para contentarnos.

4°: quizás te sientas mal por algo que te dijeron, pero todo pasa. Y si respondés con una agresión, te vas a sentir doblemente peor.
5°: porque una creencia sobre vos sea generalizada, no quiere decir que te tengas que transformar en eso. Pero si algo de lo que dicen de vos es verdad, hacete cargo. Si querés cambiarlo, cambialo. Si no, defendé a muerte tu derecho a ser como quieras ser.

6°: viví hoy sin pensar en el pasado o el futuro. Pero aprendé las lecciones muy bien y tratá de no repetir los errores. Date la posibilidad de cometer nuevos. Y perdonate a vos mismo pero empezá perdonando a los demás.
7°: mirate al espejo dos veces por día. Una cuando sonrías y otra cuando llores o tengas expresión sombría. Y recordá que seguís siendo vos. Con tus cosas buenas y con tus cosas malas, sos único e irrepetible.

8°: si no te gusta sacarte fotos, al menos, sonreí cuando lo hagas. De esa manera, al menos vas a tener buena cara y no te va a desagradar tanto verla.
9°: medite a vos mismo con la regla más severa. Y a los demás, con la más laxa. Pero no permitas que los demás lo hagan al revés. Tratá de dar siempre el ejemplo. Guiá y que los demás te sigan. Pero si estás en presencia de una persona digna de ser seguida, hacelo y aprendé de ella.

10°: lo que tengas que resolver vos, resolvelo. Lo que tengas que esperar que se resuelva, armate de paciencia y esperá. Y si tarda mucho en resolverse, tratá de no considerarlo un problema y fijate si cambia tu enfoque del mismo.

11°: disfrutá la vida. Es una sola y es corta. Disfrutá de tus amigos, tu familia, no gastés tu tiempo odiando. Sólo trae sentimientos negativos y no es bueno. Buscá la buena onda. Y cuando no la sientas alrededor, andate de donde estás hasta encontrarla. Aunque dure poco, al menos te alegrás por un rato.

12°: todo lo que te guste de vos, cuidalo. ¿Te gusta tu buen humor? Seguí riéndote. ¿Te gusta tu pelo? Peinate con suavidad. ¿Te gusta tu mente? Nutrila, desafiala. Y si no te gusta nada de vos mismo, buscá tu rasgo más interesante y modelalo hasta que quede a tu gusto.

13°: llorá y sentí miedo, pero no permitas que ni lo uno ni lo otro te dominen.
14°: aprendé algo nuevo cada día. Para eso hay que mirar con mucha atención hacia fuera y dejar de mirarse el ombligo. Hay que rodearse de estímulos. Hay que salir de la burbuja. Pero eso no quiere decir que tengas que abandonar “tu” mundo. Cada nuevo pedazo de información sirve como ladrillo para vos. Pero no lo uses como forma de crear muros, hacé puentes.
15°: buscá en cada persona lo bueno y desechá lo malo. Pero que tus amigos tengan muchas cosas buenas y pocas cosas malas.
16°: no te pongas a la altura de la generación siguiente. Tratá siempre de comprender tu generación y transmitir sus valores. La generación anterior cometió errores, pero no los culpes de tus problemas. Cada cual atiende su juego, así que tratá de dejar el mejor legado.

17°: nadie está exento de sufrir una pérdida. Pero si perdés a alguien que quisiste, es porque al menos te acompañó un tramo del camino. No pierdas la oportunidad de decir cuánto querés a alguien, quizás mañana no se lo puedas decir. No dejes de dar un abrazo (o de pedirlo) por vergüenza. Hacete escuchar en todo momento, hasta con tus besos.
18°: no te pongas en situaciones incómodas. No fuerces tu presencia. No permitas que te hagan sentir excluido. No busques pertenecer a un grupo, eso viene naturalmente. Y si te sentís extraño a algo, ajeno, cambiá de ámbito. No intentes camuflarte pero tampoco pretendas que los demás se adapten a vos. Si este no es tu lugar, seguí de largo y buscá en el próximo. En algún momento, llegarás “a destino”.
19°: si el sueño está difícil, levantate de la cama y ponete a leer. Dejá que tu imaginación vuele y media hora más tarde intentá dormir nuevamente. Si seguís teniendo dificultad para cerrar los ojos y descansar, ocupá tu mente con algo más que los problemas que no te dejan dormir.
20°: último, pero no menos importante, Dios. Lo dejé para el final porque no muchos leerán hasta acá, y muchos menos querrán leer sobre lo que yo tenga que decir de mi querido Padre. Pero sólo le voy a dar las gracias por darme el don de la escritura y dejarme expresar en modo más o menos decente.
Todas estas cosas me cuestan en mayor o menor medida. Pero la que más me cuesta, definitivamente, es vivir hoy sin pensar en el pasado o en el futuro. Y me cuesta mucho perdonarme a mi misma. Pero también sé que voy a cambiar eso.